Si juntamos dos de las cosas que más me gustan como son Meryl Streep y la música rock, mezcladas con situaciones cómicas algo inverosímiles y una historia familiar, tenemos Ricki. Es una comedia divertida, que en ocasiones, para romper ese hilo cómico, introduce el drama familiar de por medio. Una madre que abandonó a su familia para ser estrella del rock y que años más tarde intenta reconciliarse con ellos. La película parece en algunas ocasiones predecible, pero te acaba en muchas ocasiones sorprendiendo, ya que no acaba como lo esperas, al menos como yo lo esperaba. Me sorprendió también un detalle que a veces se pasa por alto, pero que si te das cuenta, si no se ha hecho bien queda bastante mal y es el hecho de que si un personaje tiene que tocar un instrumento, ese actor, tiene que por lo menos interpretar que sabe tocar el instrumento. Aquí, en el caso de Meryl Streep con la guitarra, se aprecia, que si no sabía tocar la guitarra, ha tomado clases para poder interpretar que tocaba este instrumento.
En el tema actores, obviamente tenemos que destacar a Meryl Streep, que otra vez vuelve a sorprender con otra faceta, en este caso, una rockera venida a menos y en quiebra. Es por este tipo de cosas por lo que ha estado nominada 17 veces al Oscar. Me gustaría además destacar la escena en la que únicamente están ella, su voz y una guitarra acústica, porque se ve realmente que aparte de actriz, es cantante. Destacar además el tandem que hace con su hija Mamie Gummer. En mi opinión, deberían hacer más películas juntas, porque tienen una qúimica en pantalla increíble. Además, Mamie, me ha sorprendido bastante. Nunca la había visto antes y me ha sorprendido. Los protagonistas masculinos, Kevin Kline, haciendo del exmarido de Ricki, Sebastian Stan, haciendo de uno de sus hijos y Rick Springfield, haciendo del guitarrista de su grupo y de su "amigo" aportan humor, pero también ese punto contrastante de drama. En el caso de Rick Springfield, la pareja que hace con Meryl Streep, se encarga de poner ese toque diferente que está presente en toda la película. Con Kevin Kline, Meryl aporta el toque más cómico, pero desde el punto familiar y con Sebastian Stan, el toque más familiar y dramático. Destacar también el pequeño papel de Ben Platt, conocido por su papel de Benji en "Dando La Nota". En Ricki nos encontramos con un barman del local donde principalmente toca Ricki and The Flash, fan de Ricki con problemas familiares. Me ha sorprendido también, puesto que únicamente le había visto en "Dando La Nota"
Jonathan Demme nos presenta una película familiar, que aunque en ocasiones busca demasiado la comedia y la emoción, provocando en ocasiones escenas forzadas, nos demuestran que Meryl Streep podría ser perfectamente una estrella del rock.
Nota: 7.5
